Descubrí un oasis en mitad
del ruido,
con sus acantilados
rompió el caos y ordenó
mis olas
se vistió con mi espuma
para besar mis abismos.
Él
me entregó su playa
y la calma de la tierra;
yo
le abracé las costas y los cabos
humedecí sus grietas
juntos
coloreamos la soledad.
Fui un mar enfurecido
la misma tempestad-
pero se derritieron mis marejadas
al descubrir aquel oasis
aunque
quizá, fue él
quien me encontró
a mí.
T.
Con las manos en las letras © 2023 by Tania Suárez Rodríguez is licensed under CC BY-NC-ND 4.0








