,

La grulla que aprendió a volar

La grulla que aprendió a volar

Había una vez una joven grulla que deseaba volar alto, pero temía caerse. Toda su vida se había sentido excluida, alienada, a la deriva en medio de una marea de individuos que jamás se paraban a conocerla realmente. Sus hermanas eran gráciles, hermosas y muy elegantes, pero la joven grulla creía que no estaba a la altura, que no era suficiente y debía hacer algo para demostrar su valía. ¿Por qué no la miraban cuando estaba junto a ellas? ¿Habría hecho algo mal? La joven grulla no podía dejar de preguntarse por qué no encajaba, por qué sus hermanas la miraban con desdén cuando pasaba a su lado. En esos instantes que desgarraban su alma, escondía sus lágrimas entre sonrisas para disfrazar su dolor.

Cuanta más indiferencia percibía, más temía lanzarse a volar. Así, cada día y durante años, veía a sus hermanas volar orgullosas por el firmamento mientras ella se sentaba junto a la ribera del río y sumergía sus patas en el agua helada, castigándose por no ser mejor, por no poder alzar el vuelo.

Un día, mientras las admiraba boquiabierta desde la lejanía, resbaló con el rocío de una roca y cayó al río. El gélido arroyo envolvió a la pequeña grulla en un torbellino interminable de pinchazos incesantes que no hacían más que aumentar. Durante aquella vorágine, la joven grulla vio toda su vida pasar por delante y solo podía pensar en que no había logrado volar ni una sola vez. Pero…, ¿realmente lo había intentado? ¿O el miedo al fracaso le había impedido intentarlo tan siquiera una vez?

Leer cuento completo


***Foto inicial: VCG Photo

Con las manos en las letras © 2023 by Tania Suárez Rodríguez is licensed under CC BY-NC-ND 4.0 

2 respuestas a “La grulla que aprendió a volar”

  1. Avatar de digresionesalmargen

    El cambio que más importa es el que tiene lugar dentro de uno mismo ❤

    Le gusta a 1 persona

Replica a Tania Suárez Rodríguez Cancelar la respuesta

Soy Tania

¡ALBRICIAS, AMANTES DE LAS LETRAS!
Os doy la bienvenida

Mi pequeño gran espacio para dejar volar la imaginación, dar libertad a la creatividad y jugar con las palabras.

Escucha mi pódcast en iVoox y en Spotify